martes, 3 de abril de 2007

los pozos en Burkina Faso





ANEXO 1
Informe de Fernando Marin
Geólogo de Geólogos del Mundo en Burkina Faso, colaborador en este proyecto como controlador de las perforaciones.

Bobo-Dsso, 01/04/2007
DEFICIENCIAS EN LA EJECUCIÓN E INSTALACIÓN DE POZOS. CONSECUENCIAS. (ÁFRICA DEL OESTE.)

INTRODUCCIÓN

La creciente necesidad de buscar soluciones al aporte de agua en las comunidades por los distintos agentes que actúan en el terreno pasa, en la mayoría de los casos, por la búsqueda y explotación de recursos hídricos del subsuelo.

Ello ha originado un empuje en el sector de empresas que a nivel nacional e internacional están dedicadas a este sector. Grandes remesas económicas que todos los años son puestas en circulación para la realización de trabajos hidráulicos.

El mercado tiene entonces su movimiento y sus clientes que esperan. Aparece el factor plazo y por ello, además de importar sofisticados y caros equipos de perforación, también se importan las prisas.

La calidad de los trabajos no siempre es la óptima. Ello repercute en funcionamiento de las obras. En el caso concreto de los pozos y sus bombas de extracción se traduce en un acortamiento excesivo en la durabilidad en su funcionamiento. Cuestión determinante en el contexto de los bajos recursos con los que las comunidades locales cuentan para subsanarlos a modo provisional y de forma repetitiva.

Las estadísticas muestran la paradoja un elevado número de pozos inoperativos, muchos de ellos no muy antiguos, a la vez que sube la demanda de estas obras por parte de la población local.



CAUSAS Y CONSECUENCIAS

Implantación (puntos recomendados a perforar mediante geofísica). Se estudian pocos perfiles -a veces solo 1- antes de hacer los sondeos eléctricos verticales (SEV).

La extremada rapidez en la ejecución de las perforaciones dificulta la correcta percepción y cuantificación de los aportes de agua aparecidos en la columna del sondeo. Este factor se agrava considerablemente cuando se necesita emplear la bomba de lodos. La determinación y localización de los aportes encontrados es esencial para el correcto diseño de instalación del pozo (colocación eficaz de las rejillas filtrantes, posición y longitud de éstas. Sellado de aportes superficiales que se quieran desestimar por sospecha de contaminación, etc.).


Finalización del pozo a cotas insuficientes. Se desestima la posibilidad de encontrar caudales más interesantes a mayor profundidad y se subestiman las profundidades extras a perforar para colocación de decantadores amplios en el fondo del sondeo.

Empleo de material inadecuado e insuficiente como masivo filtrante. Se utilizan gravas que no son lavadas. Perjudicando innecesariamente el desarrollo.

El anillo de gravas que protege a las rejillas filtrantes de la entrada de partículas en el pozo suele ser exiguo. En la operación de relleno de estas gravas no suele comprobarse su medida una vez emplazadas. Tampoco suele haber operaciones que ayuden a estas a asentarse. Creando cavidades que serán rellenadas de material terrígeno que tocaría directamente la rejilla. Escaso margen de seguridad en el paquete filtrante de gravas para que sobrepase con garantías la altura de las rejillas filtrantes.

Desarrollos (inyección de aire a presión) excesivamente cortos. Siendo el capítulo más importante en la ejecución del pozo. Ya que garantiza la durabilidad de la obra. No se mide la turbidez del agua para decidir el fin del desarrollo. Quedando en la mayoría de los casos incompletos (la OMS recomienda no pasar nunca de 5 NTU).

No se realizan ensayos de bombeo tras el desarrollo. Que completaría el desarrollo. Se hacen mediciones muy aproximadas y sin someter a regímenes de stress al acuífero. Por tanto de desconocen los caudales efectivos y los niveles dinámicos reales.


El deficiente desarrollo que elimine las partículas finas en el área de captación provoca la entrada de fracciones sólidas que llegan hasta las rejillas filtrantes de la entubación, provocando su cierre y reduciendo notablemente el caudal.


A su vez, debido al escaso -y a veces discontinuo- masivo filtrante de gravas, no hay impedimento para la entrada de estas partículas finas en el interior de la columna de captación (empeorando cuando son las propias gravas que no están lavadas). Estas partículas, durante los periodos inactivos de la bomba de extracción, sedimentan en el fondo de la entubación –decantador- . Si el diseño de éste es insuficiente provocará que la bomba alcance y aspire los sólidos e incluso llegará a cegar los poros de la rejilla filtrante (pérdida de caudal de aforo). Se produce desgaste excesivo de la bomba (endurecimiento) y necesitan mayor tiempo de trabajo para un caudal residual.

El hecho de normalizar ensayos de bombeo impide conocer el nivel dinámico del pozo. Esto conduce a colocar la bomba de extracción a profundidades tomadas al azar. Cuando es colocada demasiado alta puede pensarse que se ha secado el pozo en periodos secos, mientras es tan solo una profundidad inadecuada. El fallo por exceso (invasión del área de decantación) se traduce en una mayor vulnerabilidad de la bomba ante los elementos en suspensión así como derroche de material y obligación a forzar las condiciones de bombeo.

Una vez las partículas finas han entrado en la columna de captación, además de afectar a las rejillas filtrantes, provoca el tupido de los filtros de las bombas. Acarreando la bajada de caudal y la dureza de las bombas en su funcionamiento.


La baja formación de los comités de agua y la falta de mantenimiento originan que estas condiciones se agraven hasta la inoperatividad del pozo. En el mejor de los casos se intervendrá y se limpiará el filtro. La falta de medios (compresor) hace que esa limpieza resulte somera, sin restaurar la luz original de los poros del filtro. Por lo que al poco de la operación se repetirá todo el proceso de deterioro. Algunos encargados locales, desalentados por ello, deciden desmontar el filtro de la bomba. Esto conduce a un primer incremento del caudal y suavidad en el bombeo. Tras un tiempo corto, y como consecuencia de la entrada de partículas en el cilindro que aloja el pistón, la bomba acaba estropeándose de modo irreversible (precio elevado para economía local). Ello suele clausurar el pozo.

RECOMENDACIONES

Formación y Profesionalización de los controladores o directores de obra. Desvinculación de estos con respecto a las empresas contratadas. (Independientes o de la propia organización contratante.)

Evitar precios de forfait donde, al estar todo incluido, se induce al ahorro por parte de las empresas en material y horas de trabajo. Dando siempre como resultado un pozo de mínimos.

Mayor formación en los poblados sobre mantenimiento y reparación.

Creación de un agente regional (ideal por provincias) con capacidad de almacenamiento de piezas de recambio y personal cualificado que actúe en averías mayores que superen al comité local de gestión.

Creación de una red (podría ser el mismo agente regional) de restauración y rehabilitación que, a modo periódico (p. ej. cada 2 años), haga un barrido por todos los pozos. Se ejecutaría limpieza y desarrollo de los pozos (inyección de aire con compresor para desobstrucción de rejilla filtrante, eliminación de partículas finas, reapertura de poros, desarrollo del gradiente hidráulico en el sentido hacia la captación en el cono de captación, eliminación de sedimentos en el fondo del decantador). Desmontaje de la bomba y limpieza a presión de los filtros en las bombas. Sustitución de piezas defectuosas. Podría actuarse de igual modo sobre pozos abandonados.

Mejorar la calidad de las bombas empleadas.

Coordinación entre los actores que intervienen en el agua.



Fernando Marín. GM
Abril de 2007. Burkina Faso.
Fotos: Chiara Rigotti. ASF

2 comentarios:

elniñolospozos dijo...

que binito hacer pozos
que bonito ver el agua correr
si, que bonito.

Arqui-texturas en FACEBOOK dijo...

chiara querida
hermoso ver esa sonrisa gracias al agua ...
a las bóvedas...
que la tierra nos reúna!
adelante guerreras!
besos
casilda